Para desgracia del gobierno, la muerte del ex presidente (aunque a algunos les moleste) Augusto Pinochet Ugarte, les viene como un balde de agua fría, ya que ahora no tendrán a quien colocar en la palestra mediática para sacar cada vez que se encuentren en aprietos. Quizás ahora sacarán a relucir a la familia del ex comandante en jefe o a sus más fieles adherentes, tal como lo han hecho durante estos últimos días, y expulsar del ejército a cualquiera que se atreva a recordar con el honor y el respeto que se merece el legado del Gobierno Militar. Definitivamente lamentable, sobretodo si recordamos que estamos en democracia, y no en la dictadura a la que tanto aborrecen y temieron por sus insolencias, su nulo amor a la patria, y sus cobardías. Para que prevalecieran idealismos individualistas que promulgaban el robo (anulación de los principios que protegían la propiedad privada), el odio, y la tan mencionada intolerancia que ellos han sembrado y culpan a los otros del odio que existe en sus corazones. Como si sus memorias fuesen tan frágiles al recordar solo una parte de la historia. Olvidar que detrás de cualquier lucha armada siempre habrán heridos, tanto física como moralmente, y que si no son unos serán los otros los encargados de ganar la lucha. No puedo respetar las intolerancias demostradas frecuentemente por partidarios de izquierda. Ya que se llenan las bocas hablando de hacer justicia y derechos humanos, cuando han sido ellos los que han apoyado resolver conflictos a través de las armas, que la incoherencia es de tal magnitud que idolatran personajes de la historia mundial vigentes y muertos, que han puesto sobre la mesa sus opiniones con sangre en sus manos, y que la libertad tan divulgada, es prohibida por países que comparten ideales comunistas. Recuerdo muy bien al líder de la Alemania comunista, un dictador que mató a mas personas de las que murieron en Chile, y que fue recibido con los brazos abiertos por partidarios de la izquierda chilena, la misma que odia y reclama por derechos humanos en tiempos de guerra civil.
Me da mucha rabia escuchar a medios de comunicación extranjeros que opinan acerca de conflictos internos de otros países (los perritos falderos de Bush "Inglaterra", y España), cuando ellos son los menos indicados de hacerlo, ya que apoyan guerras como la de Irak, donde el único motivo que prevalece es el poder del petróleo, pasando a llevar la integridad de personas distintas política y religiosamente por una absurda guerra con la que más han perdido que ganado.
Vayan a reportear a sus países que lejos se encuentran de la perfección moral.
Y ustedes chilenos no mirar el pasado para odiar más, sino para aprender de los errores, y cuidarse de cada acto ejecutado, porque cada acto tiene una consecuencia, el robar descaradamente en tiempos de la unidad popular, dejar al país en la peor crisis económica y social, quedando en el último puesto de pobreza en latinoamérica, y huir como cobardes al primer enfrentamiento, sin querer remediar la situación provocada. Es por eso que pienso que el perdón debe ser compartido por ambos bandos o si no jamás habrá reconciliación. Al menos ganas de dar un paso no se han visto, sólo exigen el arrepentimiento de aquellos que reconstituyeron una nación pisoteada por el marxismo, y ahora se dan el tiempo para celebrar la muerte del personaje mas influyente e importante de los últimos tiempos en Chile, aquel que después de O´híggins es y será recordado como el Libertador de Chile.
AUGUSTO PINOCHET UGARTE (1915 - 2006)
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